En "guerra" con Paraguay, Doja Cat amenaza con dejar la música

Bueno, esto escaló demasiado rápido. Una pelea por Twitter entre Doja Cat y el público de Paraguay, horas después de que se anunciara la cancelación de la fecha en el festival Asunciónico en el que iba a presentarse, terminó con la californiana anunciando su intención de retirarse de la música.

La historia comenzó una vez superado su paso por las ediciones argentina y chilena de Lollapalooza. Antes de dirigirse hacia la versión brasileña del festival de Perry Farrell, los artistas internacionales continuaron sus giras hacia el Asunciónico, el festival más importante de Paraguay, y que -si bien no es parte de la "franquicia" Lolla- comparte muchas similitudes con él. Una fuerte tormenta asoló la ciudad capital del país hermano y generó destrozos e inundaciones, algo que obligó a la organización del evento a anunciar la cancelación de la primera jornada. Mientras Machine Gun Kelly puso parlantes al frente de su hotel para armar un pseudo recital para los fanss y el avión que trasladaba a Miley Cyrus debió aterrizar de emergencia tras verse afectado por un rayo, Doja Cat lidió con un problema bien distinto: la decepción de su propio público.   

“Ya fue y ya no me importa una mierda, renuncio”, tuiteó. “No puedo esperar a desaparecer y ya no necesito que creas en mí. Todo está muerto para mí, la música está muerta, y soy una maldita tonta por haber pensado que estaba hecha para esto. Esta es una maldita pesadilla. Deja de seguirme”. Sucede que, desde que Doja Cat pisó suelo guaraní, los fanáticos que la esperaban sintieron que ella no tuvo ningún tipo de gesto para con ellos. Al aterrizar en el aeropuerto Silvio Pettirossi de Asunción, la artista buscó pasar desapercibida y mantenerse rodeada de su personal de seguridad, para evitar contacto con cualquier persona. Luego, los fans de Paraguay le reclamaron que nunca bajó a la puerta del hotel para saludar a quienes la esperaban, aunque ella aseguró que no había nadie esperando por ella. “Me arrepiento de todo el tiempo que gasté preparándome ese día para el show por el que me estuve rompiendo el lomo cada día para ustedes, pero Dios los bendiga”, dijo ante los reclamos de diferentes tuiteros.

Sin embargo, la cosa no quedó allí. Sumado a la falta de atención para con los fans que querían verla, un rumor corrió rápidamente en Paraguay: Doja Cat le habría habría pedido a los empleados del hotel que no se la mirara a los ojos ni se le dirigiera la palabra a menos que ella lo hiciera primero. La furia del público terminó de estallar luego de que Doja aterrizara en Brasil y lo celebrara en sus redes sociales, algo que no hizo en Paraguay. La cantidad de tweets en su contra -provenientes de Paraguay pero también de Argentina y otros países de la región- generaron una catarata de furia de parte de la cantante con, incluso, algunos tintes xenófobos. “Doja, esos paraguayos no pueden ni comprar comida para sus hijos, ¿qué hacían yendo a un concierto?”, decía un tweet al que la cantante marcó como favorito.

La presión tuitera, la forma en la que su propio público se mostró decepcionado y le reclamó por mayores gestos y la hostilidad en la que se dieron esos cruces fue lo que, evidentemente, colmó la paciencia de Doja Cat. “Esta mierda no es para mí, así que me retiro. Cuídense”, tuiteó. Habrá que ver si al finalizar su gira sudamericana se cumplirá realmente su amenaza; de momento, hasta TMZ da por muerta su gira prevista para el verano boreal junto a The Weeknd. Una cosa quedó bien clara: con el Mercosur no se jode.