
El proyecto de LMDG fue concebido desde sus inicios como un espacio de experimentación. Cuando los integrantes de Güacho, el grupo de hard blues rockero de La Plata y una de las bandas más convocantes de la ciudad, dieron por finalizado su recorrido tras su trilogía de discos, decidieron mutar hacia un nuevo estadío. Para eso, buscaron trascender las propias fronteras estéticas, sonoras y de expectativas de parte de su público impuestas tras años de banda entre Hernán Torres y Joaquín y Lisandro Castillo. De esa forma nació LMDG, un proyecto polimorfo que se pasea entre la música y la propuesta visual, mezclando tecnología, nuevas formas de producción y una fuerte búsqueda gráfica para acompañar y completar el discurso de las canciones que finalmente volcaron en _lmdg, su primer disco. Este viernes 3 de diciembre lo presentan junto a Camionero en Dekano (49 entre 6 y 7, La Plata). Aquí, una serie de claves para acercarse a su propuesta.
La nueva etapa post-Güacho
Güacho publicó Vol. I (En la orilla del océano), su primer disco, en 2012. Dos años después fue el turno de Vol. II (Historias de Viajeros) y para ese momento las presentaciones en la Argentina crecían a la par de su público y giraban por Europa para promocionar las ediciones fabricadas allá de sus vinilos. Sin embargo, luego de editar Vol. III (La Persistencia de la Memoria) en 2017, la banda decidió dar por cerrado el viaje. Güacho se transformó entonces, en el punto más alto de su camino, en un proyecto con comienzo y final. Ese cierre fue un gesto artístico en sí mismo en sintonía con las decisiones estéticas que el grupo propuso desde el primer momento y la nueva etapa se planteó como un espacio para experimentar con libertad.
Las influencias
En LMDG no existen el estilo, las etiquetas ni el género. Los puntos de partida conjugan elementos de la psicodelia rockera, el cuelgue instrumental del krautrock, las reminiscencias visuales del ambient, las máquinas de la electrónica y el vértigo del noise. Todas esas intenciones primarias se mezclan con la naturaleza del trío en _lmdg, el álbum debut. Allí, narran un escenario distópico de un futuro no tan lejano en el que la tecnología deshumaniza y aleja a las personas. Al escuchar las seis canciones y al analizar su ADN, LMDG tiene la inmensidad del campo abierto (“Red Eyes” de The War On Drugs) y la opresión de las grandes ciudades (“Atardecer veneno” de Güacho). Suena a incertidumbre (“You Wanted A Hit” de LCD Soundsystem), tensión (“Rattlesnake” de King Gizzard & The Lizard Wizard) y miedo, pero también a esperanza (“Campeón metropolitano" de D.I.E.T.R.I.C.H.).
La propuesta visual
Al dejar atrás la toma caliente del trío de hard blues a la hora de entrar en el estudio y grabar sus canciones, sumado a la distancia impuesta por la pandemia, para LMDG cambiaron los métodos de composición y grabación. La banda se rodeó de máquinas, programaciones y baterías electrónicas, y bajo el concepto de laboratorio decidió probar y probar, a la distancia y sin limitaciones. La gráfica y el arte de Imaginería del Mar Muerto y Lucas Borzi sirvieron además para materializar el universo creado desde la música, un espacio urbano distópico que bien podría ser Tolosa, Tokio o un escenario de Blade Runner. Fotografías intervenidas con trazos símil acuarelas trasforman sus rostros y escenarios urbanos, desafiando las referencias reales y convirtiéndolas en lugares y personajes ficticios.

La gráfica
El hecho de conjugar la música con soportes gráficos, tanto en la propuesta visual como diferentes elementos ya conocidos, le permite a LMDG experimentar. Una de los lanzamientos a la hora de su primer show fue una remera-álbum. Si bien las prendas de bandas son algo que lleva adelante cualquier grupo en sus puestos de merchandising, desde la Imaginería del Mar Muerto sumaron otro detalle de maenra atípica: un código QR que, al momento de escanearlo, dirige al usuario al perfil de Spotify de la banda para que reproduzca su álbum debut.

El disco
_lmdg es un elemento más dentro de todo el universo estético y de intenciones de LMDG. Luego de liberarse de las ataduras que podría imponer un proyecto consolidado de más de 10 años, iniciar un nuevo camino, desde cero y sin presiones, ofrece libertad. La intención experimental y las nuevas formas de composición que llevaron adelante dieron por resultado un disco de seis canciones oscuras y urbanas que reflejan el hastío de la rutina y las presiones ejercidas por ese contexto distópico y postmoderno. _lmdg es entonces el disco debut del proyecto y el punto de partida para contruir, de ahora en más, una nueva narrativa.