Ignacio Guebara
Juliana Wainsztein (fotos)
"Vengo desde Córdoba a copar la gran ciudad", recita Juan Ingaramo en "Mi chica", la canción con la que eligió cerrar su set en el Personal Fest 2018. Los avatares climáticos del fin de semana -que redujeron al extremo la grilla del festival- ayudaron a que el muchacho cumpliera su objetivo, quedándose con el mejor horario otorgado a un artista nacional.
La decisión de ubicarlo en ese lugar no fue caprichosa. La marea creciente de veinteañeros que comenzaba a llenar el campo al mismo tiempo en que Carlos Izquierdoz anotaba el 2-2 en la Bombonera, demostró su fidelidad desde el inicio. Ingaramo respondió a ese cariño con creces: "No saben lo lindo que se ve desde acá", agradeció promediando el show, impulsando el aplauso general.
De la reivindicación de la autoconfianza post separación de "Comodín" ("A partir de hoy, me quiero a mí mismo más que a vos / Simplemente así debió ser siempre") a la elegía sentimental de "With U" ("Hoy de golpe sos perfecta / y la culpa llueve cada vez que recuerdo todo lo que no hicimos juntos"), el cantautor generó espacios para moverse entre el pop, el rap y el trap con comodidad. Lo mismo hizo en el bloque de invitados, con "Ladran" (junto a Louta y un sampleo grabado de Neo Pistéa) y "Fobia" (acompañado de Dak1llah y Ca7riel).
El momento más atractivo de la tarde llegó con su versión groovera de "Fuego y pasión", de Rodrigo, en la que Emme -que oficia de contraparte ideal en sus shows- demostró una vez más su potencia vocal. "Es una canción de mi tierra", dijo para presentarla; la revolución mediterránea cerró filas, al filo del atardecer, en plena Capital Federal.
