Las Armas Bs. As. - "El camino no elegido"

Las Armas Bs.As. abre su nuevo disco, El camino no elegido, con los tres integrantes del grupo cantando, aplaudiendo y haciendo slide con una petaca de whisky en un diddley bow, esa especie de guitarra de una sola cuerda tensada entre una lata y un palo de escoba. Esos pocos elementos son suficientes para hacer canciones y cantar blues. Eso y el dolor.

El imaginario de rutas de la llanura pampeana, parrillas camineras, santos paganos, amores perdidos y persecuciones policiales que Las Armas Bs.As. planteó en su debut, Vol. I, tiene su continuación aquí. Pero en este caso, aquel Gauchito Gil pintado en el acoplado ahora maneja el camión que ya no recorre las rutas provinciales sino que llegó a la realidad del conurbano y con ello a las miserias de la ciudad. No es casualidad que sea el blues el sonido que domina la atmósfera de El camino no elegido (cuyo título resulta, al mismo tiempo, un guiño y una negación a cualquier parecido sonoro con The Black Keys y su disco El Camino, de 2011) , ya que sus nueve canciones son un constante lamento. Lamento de la realidad, la soledad, el sexo vacío, la policía y el gatillo fácil, el patrón y tantas otras cosas más.

Las novedades son tanto “La Habitación” como “La Moto” gracias al trabajo conjunto del productor del disco -y nuevo guitarrista de la banda- Lucas Gregorini y el técnico de sonido Gabriel Ricci. Si bien tienen la esencia del rock and blues bonaerense (Las Armas Bs. As, es consciente de su geografía no es el Mississippi ni en los campos de algodón) hay un coqueteo con el pop que hace estas canciones las más destacadas entre tanta canción guitarrera. “Vamos a frenar un poco acá / hay demasiada gente en esta pieza / quisiste hacer el amor en paz / y ahora se deshace con tristeza / es un mundo sombrío / y ni siquiera yo soy mío”, cantan en “La Habitación” frente a un drama amoroso multitudinario.

Hacia el cierre, el momento más oscuro del álbum llega con una radiografía de época. “Junto a un aviso de descuentos / saldrá en el diario al otro día / dirá que hay un chico muerto / y que enfrentó a la policía / y en la tele hablan de ropa y eventos / y en la radio suena el hit del momento”, cantan en “El Hit del Momento” en tiempos de muertes dudosas por disparos de uniformados. Para “El Futuro es una Mujer Negra”, la canción final que retoma la instrumentación que abre el disco, Ramiro "El Mister" García Morete lee la coyuntura social y da con una reflexión precisa, que lo pone a jugar en la liga de los compositores más destacados del rock platense actual: “En Memphis, Tennessee, en La Matanza o LP: si hay futuro es negra, porque seguro es mujer”.

Mañana es mujer.